viernes, 2 de noviembre de 2018

Juan Ramón Jiménez


Biografía

Nació en Moguer (Huelva). Entre 1900 y 1905, y a partir de 1913, vivió en Madrid, donde promovió la revista de poesía Helios y estuvo vinculado a la Residencia de Estudiantes. En 1916 viajó a New York al encuentro de la que sería su esposa, Zenobia Camprubí. De este viaje nació el Diario de un poeta recién casado, publicado en 1917, el mismo año que la versión definitiva de su célebre Platero y yo. Su compromiso con la República lo condujo al exilio en 1936. En 1956 obtuvo el Premio Nobel de Literatura. Murió en Puerto Rico. 

Este presenta una trayectoria poética singular: la búsqueda de la belleza, de lo esencial o lo absoluto a través de la poesía como medio para combatir el paso del tiempo y dar sentido a la existencia. 

Su época se distingue en tres etapas: 

Poesía modernista y posromántica

A lo largo de sus poemarios, Juan Ramón lleva a cabo un proceso de depuración que parte de una retórica modernista, la complacencia del dolor, o el uso de símbolos característicos y evoluciona hacia una poesía más contenida e introspectiva.
Los temas característicos de esta primera etapa son los siguientes:

-La búsqueda del “sentido profundo y eterno de la vida”: un vago anhelo de infinito que solo encontrará respuesta en la última etapa de la trayectoria poética del autor. 

-La obsesión por la muerte, y la tristeza, la nostalgia o la melancolía como estados de ánimos dominantes. 

Poesía pura o desnuda 

En los libros de esta segunda etapa se postula la existencia de dos planos de realidad: la realidad material, perecerá, de las apariencias, y una realidad invisible, que el poeta debe descubrir y para así salvarla y defenderla del tiempo. Al desvelar esa realidad oculta, el sujeto vislumbra la posibilidad de un yo esencial, eterno.

Para expresar estas ideas, el autor se sirve de dos símbolos básicos: 

-Los nombres: el nombre de las cosas se convierte en símbolo de su esencia. Al dar nombre a la realidad, la rescata del deterioro y de la temporalidad. 

-El mar: representa la pluralidad del mundo.

Últimos libros 

Desde 1936 hasta su muerte, Juan Ramón publica cuatro libros: La estación total, Espacio, Romances de Coral Gables y Animal de fondo. Y el segundo y tercero fueron pensados como secciones de En el otro costado, y el cuarto, como parte de Dios deseado y deseante. En todos, ellos se aprecia el influjo del panteísmo, el hinduismo o de la poesía mística, que ofrecen nuevos caminos a la búsqueda metafísica o espiritual del autor. 

La estación total
Este volumen está formado por cincuenta y cinco poemas en verso libre, en los que se conocen los siguientes ejes temáticos:

-La muerte se percibe como un tránsito en el que la conciencia individual de funde con el cosmos, haciéndose eterna.
-Es posible acceder a instantes de éxtasis en los que el yo se siente fuera de tiempo histórico y en armonía con el todo. Ocurre en el poema “Mirlo fiel” donde la voz poética alcanza un momento de beatitud escuchando el canto de un pájaro.

Espacio
En este extenso poema en prosa, organizado en tres partes, Juan Ramón Jiménez utiliza como molde expresivo el monólogo interior. Cada sección consiste en un fluir verbal ininterrumpido, en el que se suceden recuerdos, reflexiones metafísicas, alusiones a poetas, citas… Espacio constituye una de las cimas de la poesía occidental del siglo XXI.

Temas de Espacio:
-Frente al paso del tiempo y la muerte, el yo poético busca “un punto de salida, que llamamos, Edén, Oasis, Paraíso, Cielo”. Y lo halla dentro de sí, en su conciencia.
-En la conciencia del yo se funden, todos los tiempos y espacios en los que ha transcurridos su existencia. Dentro del sí todo el universo, en una fusión con la totalidad que le depara una sensación de plenitud.

-La idea de la que la conciencia individual desaparezca, al morir, produce al yo poético una punzada de dolor.

Animal de fondo
En este último poemario, la voz poética expresa, en un tono de celebración cercano a la mística, la fusión con ese dios vislumbrado en Espacio: su propia conciencia, capaz de interiorizar por medio de la poesía la belleza del “todo eterno que es el todo interno” y encontrar, así, lo infinito o absoluto.

No hay comentarios:

Publicar un comentario